Hombres y mujeres

Hombres y mujeres... Seres humanos hablando el mismo lenguaje, pero con muchas diferencias. Según estudios realizados en diferentes universidades de todo el mundo, cuando estas diferencias son entendidas, hombre y mujer se convierten en amigos inseparables. Debido a que comprenden y aceptan que piensan de diferente manera, los conflictos disminuyen. Ellos tienen una mejor percepción del espacio. Ellas se comunican con mucho más facilidad. Aunque hay excepciones, los hombres en la mayoría de las veces dominan el raciocinio de las matemáticas con más velocidad. Las mujeres, sin embargo, tienen en sus manos una percepción de detalles que escapa a la mayoría de los hombres.

Lo más sorprendente es que muchas personas ignoran el asunto y pasan la vida tratando de convencerse de que el universo masculino es igual al femenino. El resultado es siempre el mismo: una infinita insatisfacción personal. Las diferencias comienzan en la estructura física

Según las autoridades de la Medicina del Deporte, en relación con el potencial de la fuerza física entre hombres y mujeres, ellas son en promedio 30% menos fuertes que ellos. En cuanto al peso de los músculos del hombre alcanza el 40% del peso total del cuerpo, la mujer llega a sólo el 33%.

Las hormonas son la respuesta a todas estas diferencias. Incluso si una mujer entrena constantemente nunca será igual a un hombre. Esto es porque el desarrollo de la fuerza física está asociado con la hormona masculina testosterona. Las mujeres también producen testosterona, de lo contrario no estarían en pie. Una encuesta realizada en el área comprobó que la producción de testosterona en el hombre llega a 10 mg diarios, mientras que la mujer no es más de 0,1 mg.

La autora del libro "Cómo piensan las mujeres", que se convirtió en un best seller, siendo traducido a 18 idiomas. La estadounidense neuropsiquiatra Louann Brizendine, señala las razones biológicas como responsables de todas las diferencias entre el cerebro femenino y el masculino. Lo que se sabe es que en el cerebro masculino, la estructura dedicada al impulso sexual es dos veces y media mayor que el cerebro femenino. En las mujeres, los circuitos asociados con la audición y el lenguaje tienen 11% más neuronas que en los hombres y la estructura relacionada con la emoción y la formación de la memoria también es mayor.

La Biblia nos muestra un ejemplo bastante interesante en esta cuestión de las diferencias. “Y la trajo Isaac a la tienda de su madre Sara, y tomó a Rebeca por mujer, y la amó; y se consoló Isaac después de la muerte de su madre”. (Génesis 24,67)

Sara acababa de morir, y aunque Isaac había sufrido con la muerte de su madre, no había más que hacer. Si la madre fuese de Rebecca, tal vez la relación no habría ocurrido. Pues los sentimientos de ella hablarían más alto, por ser una mujer.

Varios estudios y encuestas indican que los hombres piensan con un hemisferio del cerebro en el momento en que realizan una actividad, mientras que las mujeres usan ambos. Los científicos creen que, tal vez por esta razón ellas llevan a cabo diversas actividades al mismo tiempo, mientras que los hombres encuentran grandes dificultades. La concentración del hombre es mayor. Con respecto a las relaciones, esto puede tener un impacto negativo, porque hay una distracción natural con respecto a las voluntades de los demás.

Al menos en la inteligencia, los dos se igualan, pero hay diferencias. A los hombres les resulta mucho más fácil pensar visualmente, y la mujer, sin embargo, traduce sentimientos en palabras con rapidez, además de tener facilidad de interpretar las expresiones faciales con un vistazo, le permite percibir lo que la otra persona está sintiendo. Esto se explica por el mayor número de células nerviosas en el cerebro femenino y que son mucho más activas que en los hombres.

Lo que se sabe es que el hombre recibe un baño de testosterona durante la etapa fetal, esto disminuye el tamaño de algunas estructuras en el cerebro, tales como los centros de comunicación y la emoción. De los 9 a 15 años, hay un aumento progresivo de la testosterona en los niños en 25 veces. Así como la testosterona actúa directamente sobre algunas células, haciéndolas crecer, también actúan en algunas zonas, reduciéndolas y destruyéndolas.

Dios creó al hombre y a la mujer por separado con sus diferencias, de modo que uno completa al otro. Cuando los dos cumplen sus papeles, procurando conocer y comprender el universo del otro, sin duda, Dios actuará en la relación. Las luchas se convierten en una rutina que anteceden a grandes conquistas.